Ayer publicaba Infolibre la grata iniciativa de Ezquerda Unida, la federación de IU en Galicia, donde se anunciaba que dicho partido político había denunciado a la Fundación Francisco Franco por un comunicado emitido el 14 de agosto pasado donde aseguraba que el dictador ni había fusilado ni ordenado condena de muerte alguna. Basándose en la posibilidad de que estas declaraciones constituyan un delito de odio tipificado en el código penal, Esquerda Unida presentó ayer ante la fiscalía la denuncia pertinente y publicó en su web una declaración donde se denunciaba la situación de impunidad de la que disfruta la Fundación así como la inanición del Gobierno al respecto.
http://www.fnff.es/Comunicado_La_peticion_de_ilegalizacion_de_la_FNFF_3677_c.htm
Es obvio que Francisco Franco, en tanto que Jefe del Estado, ni fusiló a nadie, ni dictó condena a muerte alguna: las condenas no las decide el Jefe del Estado, sino la Justicia.
No puedo sino apoyar y celebrar que se haya producido la citada denuncia, es algo que tenía que haberse producido hace mucho tiempo. Pero no es menos es cierto que esta tesitura no tendría cabida en un país europeo democrático donde es impensable la existencia de una fundación de semejantes características. El mismo hecho de su existencia constituye una anomalía democrática tanto en cuanto su finalidad no es otra que la de la exaltación de un dictador que impuso su tiranía provocando una guerra civil y reprimiendo con violencia, torturas y asesinatos a la oposición democrática. Siendo el único régimen fascista que asesinó a un presidente del gobierno disfrazando de consejo de guerra dicha muerte. Los historiadores más reputados aceptan que la represión franquista superó las 100.000 víctimas mortales enterradas en fosas comunes cuya exhumación también supone una asignatura gubernamental que está pendiente . Dicho de otro modo, aunque coincidiendo en que el citado comunicado de la FFF a los ojos de cualquier persona sí supone un delito de odio, lo hace también los numerosos comunicados que han ido realizando durante años. Toda su página web es una apología golpista y del fascismo. Una negación de la violencia franquista pintándola de un mandato salvador que en circunstancias extremadamente difíciles decidió aceptar la responsabilidad de tomar el timón de España ocultando todo rastro de violencia. Si ya es bochornoso que sea legal la existencia y funcionamiento de una fundación que justifica a todo un asesino en masa, resulta insoportable que un gobierno que presume de democrático financie con el erario público su economía. Porque debemos saber que parte de nuestros impuestos van destinados a financiar a la FFF. Aunque solo fuerza un céntimo ya sería escandaloso. Si se impusiera el sentido común la iniciativa de Ezquerda no habría tenido lugar porque sería ciencia ficción una Fundación similar a la Francisco Franco. Pero eso es mucho imaginar tratándose de España. Sin embargo estoy convencido de que si los partidos de izquierda democráticos siguen en su empeño llegará el día en que esto se haga realidad por un sencillo argumento que cae por su propio peso; es incompatible su existencia con la aplicación de la ley de Memoria Histórica donde se impide la exaltación de personajes franquistas. Porque ya me dirán ustedes qué sentido tiene retirar una estatua ecuestre del dictador mientras se destina parte del presupuesto a la fundación que exalta su dictadura. En el artículo 15 de la citada ley se dice textualmente.
http://leymemoria.mjusticia.gob.es/cs/Satellite/LeyMemoria/es/memoria-historica-522007#a15
Artículo 15. Símbolos y monumentos públicos.
- Las Administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura. Entre estas medidas podrá incluirse la retirada de subvenciones o ayudas públicas.
Es imposible discrepar sobre la incompatibilidad de la ley y la existencia de la FFF por antagónicas. Así que habrá que recurrir a una vía secundaria para ver cómo se posiciona la Justicia. Al igual que a Al Capone se le procesó por evasión de impuestos en lugar de sus crímenes quizá sea por un desliz comunicativo por el que la FFF se enfrente a un tribunal. Difícil pero realizable.
Autor: Jordi Pedrosa
